El desempeño del comercio mundial podría mejorar para el segundo trimestre
Si bien los volúmenes del comercio mundial durante el primer trimestre se mantuvieron bajos, las previsiones para el segundo trimestre muestran una leve mejoría, aunque la misma no estaría exenta de inestabilidades, sobre todo financieras.
Dicha mejoría está relacionada a los actuales aumentos de los pedidos de exportación. Con estos datos, las previsiones para todo el 2023, según la OMC, son de un crecimiento moderado de tan solo el 1,7%, un porcentaje bastante más bajo que el 2022, cuando el volumen del comercio mundial creció 2,7% y las previsiones eran del 3,5%. Los elevados precios de las materias primas, el endurecimiento de las políticas monetarias en respuesta a la inflación, los efectos persistentes del COVID-19 y las crecientes tensiones geopolíticas, fueron los principales factores que incidieron en el comercio y la producción en 2022.
Es probable que en 2023 ocurra lo mismo y se sumen los efectos de los aumentos de las tasas de interés. Sin embargo, un cambio positivo para el 2023 es la relajación de las medidas de control de la pandemia de COVID-19 en China, lo que liberará la demanda de bienes de consumo y dará nuevo impulso al comercio internacional. Esto en parte podría compensar a efectos negativos de los aumentos de las tasas de interés en las economías desarrolladas, algo que está evidenciando las deficiencias de los sistemas bancarios y que, de no subsanarse, podrían dar lugar a una mayor inestabilidad.